Sobrevive como un náufrago

Quien quiera que dijese que una combinación de tormenta y rocas es lo peor que le puede suceder a un marinero, es que no ha logrado sobrevivir a ello. Lo peor empieza a la mañana siguiente, en el momento preciso en el que tú, querido jugador, te adentras en el cruel mundo de OoR.

Combate el hambre

El primer enemigo que te encontrarás después de sobrevivir a la tormenta será tu propio cuerpo. Hasta en los bosques tropicales hay días lluviosos y frías noches… al menos para un náufrago en pantalones cortos. Buscar un refugio para pasar la noche es tan importante como encontrar comida antes de que alguien piense en comerte a ti.

Interactúa con los habitantes

Aunque se supone que el archipiélago estaba desierto antes de que los navíos empezasen a estrellarse contra las rocas cercanas, cada zona de la isla tiene sus habitantes autóctonos que no te darán una cálida bienvenida. Pensártelo dos veces antes de avanzar es una de las opciones más inteligentes.

Explora lo desconocido

Quedarte en la playa después de que tu nave se estrelle te permite cazar animales lentos y ver a distancia. El problema es que a ti también te podrán ver desde lejos. Además, siempre puede haber alguien que crea que tú eres ese animal lento que hay que comerse.

Acumula recursos

Para situarte en la cumbre de la cadena alimentaria tendrás que trabajar más que los demás. Empieza por encontrar ciertos recursos. Tala árboles, extrae minerales y recolecta lino y alimento. Equípate y empieza a buscar materiales más sofisticados como cobre y estaño para producir bronce y otras aleaciones.

Crea equipamiento

Construye armas y corazas con una amplia variedad de talleres, altos hornos y herramientas. Prueba qué combinación de equipamiento te proporciona mejores resultados y se adapta más a tu estilo de juego. Mejora el equipamiento usando nuevos recursos u objetos recogidos en la batalla. ¡Almacena, recolecta o intercambia tus objetos con otros jugadores!

Construye bases

¿Estás buscando un lugar para almacenar madera o una cálida y tranquila sala en la que forjar una espada y curtir la piel de un elefante? ¡Construye tu propia fortaleza! Usa docenas de elementos de construcción como muros, escaleras y pisos para dar forma al hogar de tus sueños en el entorno que tú elijas… o simplemente ocupa uno.

Usa la tecnología

Normalmente las mejores soluciones a los problemas se inventan en el campo de batalla. El día a día en islas repletas de náufragos no va a ser una excepción. Para proteger tu territorio u ocupar uno nuevo tendrás que usar las ventajas de la tecnología.

• Ballesta: Cuanto más grande sea la distancia, más seguro estarás. Puede que la ballesta sea lenta de cargar y no se pueda mover, pero la capacidad de atravesar a un blanco en un abrir y cerrar de ojos con una flecha de 1.5m a cientos de metros de distancia no debería ser subestimada.
  
• Catapulta: Las situaciones excepcionales necesitan soluciones extraordinarias. Cuando un hacha no es suficiente o las puertas son demasiado gruesas es el momento de la catapulta. Construirla te costará recursos y tiempo, pero nada es más sorprendente que entrar atravesando una pared.
  
• Trampas: Bueno, en realidad hay algo todavía más sorprendente, ¡una trampa mortal y engañosa! Pon cables trampa en las puertas, en las escaleras o donde quieras, conéctalos a ballestas o lanzadores de rocas, pon un cebo y espera a los visitantes no deseados.

• Parapentes: Un ataque desde el cielo puede ser una buena idea cuando todo lo demás falla. Construye una torre, instala una rampa de lanzamiento y despega con el parapente para bombardear las bases enemigas, sortear muros o simplemente tener otra perspectiva.